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Recordamos a Alice Domon y Léonie Duquet

  • Foto del escritor: Fedefam Argentina
    Fedefam Argentina
  • 26 sept
  • 2 Min. de lectura

El 25 de septiembre, en Buenos Aires, Argentina, se realizó un acto en el cementerio de Lavalle, sitio de memoria. Fue un homenaje a Léonie Duquet, monja desaparecida durante la dictadura, arrojada al mar y cuyo cuerpo fue identificado junto al de las Madres y otros militantes que aparecieron en la costa.


La actividad fue organizada por la Embajada de Francia, la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) y la escuela de la localidad de Pavón —cercana a Lavalle— con la participación de estudiantes del programa Jóvenes y Memoria.



Desde FEDEFAM, queremos compartir las palabras de Sophie Thonon Wesfreid, abogada de las familias Duquet y Domon.


En Octubre del 2024, con motivo de la visita de Emmanuel Macron a Buenos Aires, varias familias de franceses desaparecidos durante la dictadura argentina y asociaciones de defensa de los derechos humanos pidieron ser recibidas por la Presidencia de la República Francesa. En la entrevista concedida, solicitaron que el presidente francés visitara la iglesia de la Santa Cruz, de donde fueron secuestradas, en diciembre de 1977, las dos religiosas francesas Alice Domon y Léonie Duquet. 


Las familias y las asociaciones estaban muy preocupadas por las visitas que cinco diputados del partido del presidente Milei realizaron en julio de ese mismo año a varios condenados por crímenes contra la humanidad cometidos durante la dictadura militar. Ellos declararon que se interesaban por  « luchadores por la libertad (...), patriotas, injustamente (...) juzgados por jueces terroristas (sobre la base de) acusaciones inventadas (o no) probadas» y que se comprometían a liberarlos.


Entre estos presos condenados figura Alfredo ASTIZ, oficial de la Marina, condenado el 16 de marzo de 1990 por la Corte Penal de París a cadena perpetua por la desaparición de Alice DOMON y Léonie DUQUET. 


Mis numerosas solicitudes a la justicia argentina, en mi calidad de abogada de las familias de las dos religiosas francesas, no fueron atendidas y Alfredo ASTIZ nunca fue extraditado a Francia. 

Pero posteriormente, después de la anulación de las leyes de impunidad, la justicia argentina lo condenó a cadena perpetua y está hoy encarcelado.


Hoy recordamos a Léonie y tambien a Alice DOMON, secuestrada junto a ella, torturadas ambas en la ESMA y arrojadas vivas a las aguas del Río de La Plata, como tantos otros desaparecidos de la dictadura. 

Si bien el cuerpo de Léonie fue encontrado 28 años después y enterrado dignamente, el de Alice sigue desaparecido.


«Francia no olvida», prometió el antiguo ministro de Asuntos Exteriores, Alain JUPPE, durante su visita a Buenos Aires en 1994, en relación con el secuestro y la desaparición de las religiosas francesas, crimen que aún seguía impune en Argentina en aquel momento. 

Esta afirmación no puede dejar de estar ausente en las actuales relaciones franco-argentinas.


En estos malos tiempos de falsificación de la historia, de negación de la verdad o, peor aún, de reivindicación de la legitimidad del terrorismo de Estado, nos corresponde recordar sin cesar que la tortura y las desapariciones forzadas son crímenes contra la humanidad y, como tales, imprescriptibles.


Sophie THONON-WESFREID

Abogada de las familias DUQUET y DOMON


París, 25 de septiembre de 2025

 
 
 
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